Con nuestras mochilas al hombro, nos internamos en los Andes, donde durante esta semana caminamos a través de valles y laderas, para finalmente disfrutar de los majestuosos paisajes que nos brindan las cumbres andinas. Manteniendo una altura que ocila entre los 1000 y 2000 metros sobre el nivel del mar, combinamos nuestras caminatas diarias, con el acogedor albergue que nos brindan los diferentes refugios de montaña en su cálido y rústico interior. |